Las disfunciones sexuales son problemas cada vez más comunes, independientemente del sexo.
La sexualidad es un aspecto inherente al ser humano en el que influyen todos los ámbitos de la salud: mental, psicológica, física y orgánica y, a la vez, estos influyen en ella.
Los abordajes más conocidos para el tratamiento de las disfunciones sexuales son el farmacológico y el psicológico.
Un ejemplo de la importancia del aspecto psicológico es la rueda de la sexualidad. El problema que tienes es que únicamente contempla los aspectos sociales y psicológicos., sin contar con los aspectos estructurales u orgánicos. Por ejemplo, la imagen corporal influye a nivel neurológico en la capacidad de percibir e interpretar estímulos, sean o no sexuales.
Teniendo esto en cuenta, desde la Fisioterapia, ha surgido un nuevo enfoque: la Fisiosexología.
La Fisioterapia considera el cuerpo y la persona como una unidad: intenta encontrar la causa de los síntomas en el ámbito físico y orgánico, entendiendo sus límites y la influencia de factores psicológicos, emocionales, farmacológicos, nutricionales y culturales o sociales.
La Fisiosexología trata de restaurar la funcionalidad de las estructuras sexuales, tanto de forma directa como indirecta, influyendo, entre otros, sobre los siguientes factores:
- Estado vascular y compromiso arterial o venoso que rigen la respuesta sexual.
- Movilidad y actividad nerviosa que rigen la actividad neuromuscular.
- Estado muscular, tono y fuerza, que influyen en la intensidad del orgasmo.
- Interacción de distintas estructuras corporales, tensiones y adherencias, que pueden causar alteraciones en la salud sexual.
- Sinergias, co-activaciones y dis-sinergias musculares, que han de actuar de una forma sincronizada para una correcta función sexual.
La persona que padece disfunciones sexuales no suele tener afectada una única área (psicológica, orgánica o estructural), sino que todas las áreas van sufriendo pequeñas disfunciones o problemas que terminan empeorando la disfunción sexual inicial.
El cuerpo refleja los problemas orgánicos, estructurales, y psicológico-emocionales.
Una nueva forma de ver la terapia sexual.
Una nueva forma de recuperar tu salud sexual.